SU BIBLIA EN ESPAÑOL REINA VALERA


CONOZCA SU BIBLIA EN ESPAÑOL REINA VALERA 1960

Este es uno de los temas que más me ha fascinado y al cual he dedicado varias horas de estudio. La razón es porque la Biblia es el libro sagrado, único mapa que puede hacer salvo al hombre, saber y conocer todo sobre ella es fundamental. La Biblia en el idioma inglés tiene su propia historia extensa y muy distinta a lo es la formación de nuestro santo libro en el idioma español. Algunos han alegado con muy poco criterio académico, que la Iglesia católica nos dio el canon, sin embargo, dudo mucho que ese haya sido el caso. A continuación, deseo resumir un poco de la historia entendiendo que es mucho más extensa que el material presentado aquí.reina valera

Formación del canon del Nuevo Testamento

No hay evidencia histórica que ningún individuo, iglesia o concilio ecuménico en particular determinarán en un momento específico los límites del canon. Incluso en la actualidad el leccionario oficial de la iglesia ortodoxa griega tiene material de sólo 22 de los 27 libros del N.T.

Jesús mismo preparó el camino para añadir material al canon del A.T. Cuando puso sus palabras no simplemente por encima de la interpretación de los escribas (Mt.5:33-37,43-48) sino a la par de la ley del A.T (Mt.5:21-42) Pablo dio instrucciones a las iglesias en Colosas y Laodicea a fin de que se intercambiara las cartas para lectura pública (Col.4:16). La epístola a los Gálatas debía circular entre una cantidad de iglesias (1:2). Aparentemente se enviaron copias de Efesios a varias iglesias en el Valle del Lico. La segunda de Pedro 3:1516 es la referencia más temprana a la existencia de una colección de las cartas de Pedro y muestra la autoridad que se percibía en esta colección. Para el tiempo de Ignacio, obispo de Antioquía aproximadamente en el 110 d. C ya había cierto tipo de Corpus Paulino y para la época de Marción (140 d. C) el proceso de recolección virtualmente ya estaba completo. Por eso es esencial recalcar con énfasis las palabras del hermano Neil R. Lightfoot en su prominente obra “Como nos llegó la Biblia” lo siguiente:

Ningún concilio formó el canon de las escrituras. Ninguna iglesia por medio de sus decretos, nos dieron o aprobaron la infalibilidad de los libros de la Biblia. La Biblia no le debe su autoridad a ningún individuo o grupo. La Iglesia no controla el canon, pero el canon controla la Iglesia. Así que la autoridad divina es atribuida en la autoría de estos libros por la iglesia algunos siglos más tarde. Tal como un niño identifica a su madre, la iglesia tardía identifica a los libros que ya tenían por sí mismos una autoridad única y divina.  (How we got the Bible. Neil. R Lightfoot, pág.162)

Origen de nuestra Reina Valera 1960

Existe evidencia de que la Biblia en el idioma español ya era conocida en España en el siglo 10º. Un edicto de Jaime I de Aragón en 1223 prohibió a sus súbditos tener los libros del Antiguo y el Nuevo Testamento en idioma romance. El Concilio de Tolosa en 1229 prohibió a los legos que usarán la Biblia en el idioma vernáculo sin embargo no se conocen esas traducciones. La primera traducción importante al castellano de la que se tiene datos precisos es la conocida Biblia Alfonsina traducida por orden del Rey Alfonso X de Castilla (Alfonso el sabio) que apareció en 1280 y fue una traducción de la vulgata, pero en forma resumida y parafraseada.

En 1527 el cardenal Quiroga obsequió al rey Felipe II la traducción al español que había realizado de la vulgata, esta traducción se conoce como la Biblia de Quiroga.

En 1543 apareció una versión del Nuevo Testamento traducida por Francisco de Enzinas, quién utilizó el texto griego que había publicado Erasmo en Bruselas en 1516. La obra de Enzinas fue el primer Nuevo Testamento completo que se conoció en español.

En 1556 Juan Pérez de Pineda publicó su versión del Nuevo Testamento para la cual había usado la versión encinas y había agregado su propia traducción de los Salmos. Debo decir que es a esta altura de la historia en donde Norman L. Geisler en su obra “Introducción general a la Biblia” añade a Martini y Anselmo Petite traductores         que fueron permitidos por la inquisición en 1758 hasta 1790 para traducir la Biblia al español (pág.577 del libro citado).

Para 1560 salió a la luz la Biblia del Oso, traducida por Casiodoro de Reina. Esta fue la primera versión de la Biblia completamente traducida al español a partir de los manuscritos más antiguos disponibles en la época en hebreo, griego y arameo. Para el Nuevo Testamento Reina usó la tercera edición del texto de Erasmo. Tan solo este hecho hace que Reina Valera sea muy cercana mi corazón, pues en la historia de la Biblia al español, me causa melancolía pensar en los cientos de personas que por primera vez en toda la historia del hombre estaban leyendo en su propio idioma y de forma completa la perfecta palabra de Dios. El texto de Erasmo fue muy respetado en su momento y si hablamos de la tercera edición mucho más todavía, aunque como toda traducción no escapa de los errores de traducción. Quiero ser claro en que una cosa son los errores de traducción y los errores en el contenido. Más tarde Cipriano de Valera invirtió 20 años en la revisión de la traducción que había completado Reina. Publicó el N.T en Londres en 1596 y en 1602 toda la Biblia en Amsterdam. Otras revisiones de esta traducción se hicieron en 1862, 1865, 1874, 1883, 1890, 1909, 1960 y 1995, 2016 y no estoy seguro si en la actualidad trabajan para alguna otra revisión.   Algunos me han tildado de Reina-Valera Lovera lo que me declaro culpable de todos los cargos. Yo no sé, pero prefiero confiar en un trabajo de traducción que ha sido revisado más de 20 veces que una versión moderna que acaba de salir y no posee ninguna revisión en lo absoluto.

La versión de la Biblia Reina Valera de 1960 estuvo a cargo de la sociedad Bíblicas unidas que designó un comité especial para ello. Los viajes comenzaron a manera de consultoría, participaron poco más de 80 líderes evangélicos de toda América latina, para colaborar principalmente en la revisión del castellano y asegurarse que el lenguaje estaba acorde y a la altura de las ideas originales. Países como: México, Chile, Argentina, Costa Rica (por supuesto) entre otros se dieron la ardua labor de revisión. Algunas palabras como Caridad, que se confunde con limosna debieron cambiarse por Amor en muchos pasajes como por ejemplo 1 Corintios 13.

Muchas de las diferencias entre Reina Valera y las versiones modernas radican principalmente en el texto griego base. Erasmo utilizó Textus Receptus mientras que en su mayoría las versiones modernas utilizan Westcott y Hort como base o el de NestleAland. Considero que es muy cruel desechar con alevosía y ventaja la versión Reina Valera por la Biblia de las Américas o cualquier otra versión moderna sin antes conocer al menos un poco el sacrificio de tantos hombres y los años de historia que le encierran. Gloria sea Dios de que Biblia siga siendo el libro más vendido en el mundo y que muchas versiones en español estén circulando, pero nos sigue preocupando el trato ligero que se le da a la palabra de Dios en Biblias de parafraseo o cualquier otra semejante que busque más que cualquier otra cosa venderse más y llegar al lenguaje popular de nuestros días.  Termino citando las palabras del hermano Wayne Jackson en su artículo gente que cree en la biblia” donde hace notar lo siguiente:

“¿Posee la Biblia realmente inspiración divina?  Una declaratoria escasa de evidencia es hueca. El hecho es que la evidencia para demostrar la inspiración divina de la Biblia es abrumante e impresionante… continúa diciendo, nosotros somos gente que cree en la Biblia a causa de la poderosa evidencia que contiene en la inspiración celestial de las santas escrituras.”

Referencias

Neil R. Lightfoot. (1963). How we got the Bible. MI: Baker Books.

Norman L. Geisler. (1986). A General Introduction to the Bible. Chicago: Moody Press.

Wayne Jackson. “A Bible-Believing People.” ChristianCourier.com. Access date: January 21, 2022. https://www.christiancourier.com/articles/279-a-bible-believing-people

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