¿PORQUÉ MARCOS 1:2 CITA A MALAQUÍAS CUANDO REALMENTE LA CITA ES DE ISAÍAS?
Ciertamente es una buena pregunta que amerita una respuesta concreta. Hace muchos días escuché por internet a un ateo decir que el texto de la Biblia estaba corrupto y era incoherente, el hombre citó este lugar en Marcos 1. Creo firmemente que se debe de responder con una base sólida pero no solamente para darles respuesta a los ateos sino porque en verdad la inerrancia de la Biblia podría ser la primera tela de juicio que puede venir a la mente de muchos que ya son creyentes.
La cuestión que encierra esta pregunta entra en la disciplina a la que llamamos “Critica textual” y no se llama así porque hablemos mal de los textos, sino que tiene que ver con el pensamiento crítico y las disciplinas que rigen ese pensamiento. Más específicamente esta pregunta tiene que ver con las variantes textuales. Por lo que, al ser un tema meramente técnico, nos ayuda a avanzar e incursionar en el maravilloso universo de la crítica textual.
Debería el texto de leer “como está escrito en los profetas” (ἐν τοῖς προφήταις) o debería de leer “como está escrito en el profeta Isaías” ( ἐν τῷ Ἠσαίᾳ τῷ προφήτῃ). Los unciales (manuscritos más influyentes por antigüedad) siempre son la primera fuente para consultar. Para la primera opción “como está escrito en los profetas” el testigo más importante a favor es el códice Alejandrino (A) y también el códice Washintoniano (W), ambos muy respetados por su antigüedad. Otros como algunos cursivos (180,579, 1006 entre otros) junto con los “Byz” que representan cientos de manuscritos griegos con no menos de 900 años de antigüedad también están a favor de esta lectura.
Para la otra lectura “como está escrito en el profeta Isaías” es sostenida por su parte por el códice vaticano (B), Códice Sinaítico, algunos otros códices del Siglo X y cerca de 10 manuscritos cursivos.
Bien se sabe en que en las variantes textuales no importa la cantidad que puedan respaldar una lectura o la otra sino, lo que importa es la calidad del manuscrito que lo respalda (y por calidad me refiero principalmente por antigüedad). En este caso dos unciales contra uno pueden tener mucho más peso de un lado de la balanza.
Cuando Jerónimo estaba en lo más y mejor de su obra más prominente, la Vulgata latina al llegar a Marcos 1:2 adoptó la lectura que menciona el nombre del profeta Isaías y James Snapp Jr, es quien comenta que se vio obligado a hacer un comentario al margen de este texto. El dice:
En la erudición en todo su esplendor para defender su trabajo de traducción, Jerónimo acierta que hasta donde él tenía conocimiento, Mateo cita mal Zacarías 13:7 en Mateo 26:31, en esta ocasión partiendo de mi juicio el evangelista es culpable de la falta de suscribirte a Dios aquello que eran las palabras del profeta, dice Jerónimo.
La posición de Jerónimo solamente nos orilla a una alameda un poco más compleja. Sea cual sea el asunto que defendía se nos hace parecer que ahora tenemos dos distintos errores muy similares y que parecen ser graves con distintos profetas. Pero la solución podría parecer más simple de lo que parece. De hecho al observar varias versiones provenientes del textus receptus como Reina Valera entre otras parece no existir ninguna diferencia con las versiones que provienen de otros textos griegos distintos como la Biblia de las Américas que usó como texto base a Westcott y Hort.
El asunto radica más bien en la forma de pesar las variantes. Cada copista de estos manuscritos principales, fueron muy valientes e inteligentes al hacer su trabajo de forma meticulosa. Resulta ser que cada pasaje de los antes mencionados, particularmente el de Marcos 1:2 está compuesto por dos citas del antiguo testamento citadas al mismo tiempo. Aquí el texto como tal: “Como está escrito en Isaías el profeta: He aquí yo envío mi mensajero delante de tu faz, El cual preparará tu camino delante de ti. Voz del que clama en el desierto: Preparad el camino del Señor; Enderezad sus sendas.” (Énfasis HLM).
Note con especial delicadeza que la parte que no se encuentra subrayada proviene de Malaquías 3, mientras que la parte subrayada de Isaías 40:3. El escriba al observar las dos citas combinadas en una, sencillamente para no citar a ambos profetas prefiere utilizar al profeta más prominente y el profeta menor queda a inferencia del estudiante de la Biblia. Esa es la razón por la que en los manuscritos más antiguos siempre se leerá la citación al profeta Isaías y pasa lo mismo en cualquier caso igual o similar al de Marcos 1, donde una cita está compuesta por dos textos distintos citados al mismo tiempo.
Es satisfactorio apreciar la tremenda ayuda que nos ofrece la disciplina de la crítica textual. Otras versiones ahora comienzan a traducir “en los profetas” a lo que el conocido crítico de textos y erudito, Bruce M. Metzger considera esta opción como una fórmula introductoria más incluyente, tal como lo está en algunas versiones en Ingles: King James, MIV y la WEB.
Personalmente considero que la lectura de, los profetas en nuestras versiones podría ser de entendimiento muy amplio mientras que la de Isaías el profeta, ubica rápidamente al estudiante que podrá hacer un rebusco y llegar a la otra cita omitida. Para nada es un error, sencillamente es un aspecto técnico de los muchos que pudieran existir, pero que con un poco de interés y diligencia los hijos de Dios podemos resolver con facilidad.
Referencias
Bruce M. Metzger. (2006). Un Comentario Textual al Nuevo Testamento Griego. Alemania : Sociedad Bíblica Alemana .
James Snapp Jr.. (Octubre 25, 2017). Marcos 1:2 Orígenes, Eusebio y Jerónimo. Mié.26 Enero de 2020, de The Text of the Gospels Sitio web: https://www.thetextofthegospels.com