EL SONIDO DE LA MUERTE
Al finalizar el año 2017 me encuentro con mi familia en el lugar donde crecí por unos cuantos días. La noticia de que un reconocido criminal del pueblo había caído de un puente y murió ahogado ahora recorría la pequeña ciudad, entristeciendo por supuesto a los familiares del que ahora es el hombre fallecido pero alegrando a unos cuantos que sufrían robos constantes del difunto. Mientras todos comentan sobre la tragedia hay un cuestionamiento interesante más allá de las causas de muerte: ¿Que sintió este hombre al morir? ¿Cuál habrá sido el sonido de la muerte mientras caía estrepitosamente de aquel puente colgante? ¿Cuales fueron sus últimos pensamientos?. Las estadísticas demuestran que aproximadamente 107 personas mueren cada minuto es decir unos 153,000 al día ¡Vaya que es una cifra impresionante!, es difícil imaginar que tanta gente muera cada día. Un año se va un año llega pero la realizad de las cosas es que todos nos estamos acercando cada vez más a la culminación de la vida en esta tierra. Las Santas Escrituras tienen mucho que informarnos con respecto al tema pero la información solamente sin un propósito específico no ayuda de nada, por eso la Biblia por su parte provee ambas cosas. El énfasis en esta ocasión no es respecto a la muerte misma sino más bien a los factores que están provocando la muerte espiritual de personas, familias, y de iglesias consecuentemente. Es nuestra convicción que la muerte provoca un sonido antes de arribar y que nosotros podemos identificar ese sonido (por decirlo de alguna manera) y actuar al respecto.
Cualquier congregación que tenga una dieta constante de predicación no doctrinal se debilitará finalmente en cuanto a doctrina.
Es para mi realmente triste observar congregaciones donde los miembros tanto como el evangelista local son arrastrados fácilmente por cualquier doctrina. La Iglesia de Cristo por años ha sido reconocida por su celo pero hay un grupo en específico que con mucha astucia está apartando a las Iglesias de Cristo a seguir sus doctrinas hechas por hombres. Los hermanos “anticonstitucionales” son especiales en filtrarse en congregaciones. Me duele expresarlo pero esto puede ser mucho más peligro y más amenazante que las denominaciones. Así es como huele la muerte, con estratagema y con sigilo, el aroma puro de la muerte fluye por entre los miembros cuando el liderazgo ha abandonado el celo por la doctrina y cuando se anteponen intereses económicos. El hermano Alan E. Highers preocupado por la tremenda crisis en el púlpito no pudo haberlo expresado mejor cuando escribe lo siguiente:
Sin duda estamos experimentando una “crisis en el púlpito”. Ese hecho no se cita para restarle méritos al trabajo de cientos de fieles predicadores del evangelio o para desanimar a los que pueden no estar respondiendo a su potencial, sino más bien para informarnos de las condiciones y movimientos que están afectando seriamente a la iglesia y al púlpito. Phil Sanders escribió un artículo que apareció en el ejemplar de Julio del Gospel Advocate acerca de “El Movimiento de la Iglesia Incipiente”. Este es un influyente movimiento que se está extendiendo rápidamente entre los cuerpos denominacionales e incluso influenciando a algunos en la iglesia . El autor menciona algunas características del movimiento que tienen relación con la predicación entre las iglesias de Cristo. Afirmó, “el movimiento emergente pone lo exterior por encima de lo interior (hacer lo bueno por encima de lo que uno cree). Para las incipientes , lo que uno cree no es importante; pero si uno hace lo bueno para con otros es tremendamente importante”. ¿Cuántas veces ha visto este énfasis en el púlpito? Sea amable, sea buen vecino , sea considerado, pero con muy poco énfasis acerca de las creencias correctas, la sana doctrina, o los fundamentos de la fe.
La muerte amenaza nuestros servicios de adoración, nuestras conversaciones, nuestros mensajes de textos, emails, facebook, y sobre todo nuestra doctrina. Es realmente preocupante como la nueva hermenéutica forma parte de las convicciones de muchos sin darse cuenta. Nuestros sermones de los domingos están siendo comprados en formato de libros a los denominacionales y nuestras clases bíblicas están siendo cargadas de sicología y con un énfasis de “hacernos sentir bien”. Los títulos seculares ahora son los estándares para invitar a un orador a disertar. Lo que muchos de nuestros hermanos olvidan es que incluso Dios utilizó a un burro para comunicar su mensaje (Números 22). El sonido de la muerte ha comenzado a resonar cada vez más fuerte cuando la falsa doctrina desfila frente a nosotros y guardamos silencio pensando ser sabios para no entrar en discusiones. En Judas 3 el Espíritu Santo nos exhorta a contender ardientemente por la fe que ha sido una sola vez dada a los santos. Es mi convicción que el Silencio es el sonido más fuerte de la muerte en nuestros días. Al parecer en nuestros días todos quieren ser populares, ser aceptados por la mayoría pero amigo lector el Señor dijo: “Y seréis odiados de todos por causa de mi nombre, pero el que persevere hasta el fin, ese será salvo.” (Mt.10:22 LBLA). En nuestros círculos cristianos de hoy, ésta declaración del Señor ya no tiene el mismo valor o incluso no tiene valor alguno. Cuando hay que sostenerse en lo correcto debemos de hacerlo abiertamente y sin importar el costo porque sino, nuestro silencio será demandado un día. El Señor le dijo al Profeta Ezequiel hace mucho tiempo que profetizará, que hablara aún cuando veía al frente suyo un valle de huesos secos (Ez.37:5-Ss). El Señor continúa diciendo a nosotros que nos pongamos de pie y profeticemos a un valle de huesos secos en gran manera que está justo al frente nuestro, ¿Que hará usted? ¿Guardará silencio?. Una hermana dijo hace poco que hacerlo era sabio, sabe a lo mejor ella está en lo correcto, es probable que sea de sabios guardar silencio frente abusos a la verdad pero ¿para quién? Ciertamente no para Dios, Dios nos ha enviado a proclamar todo el consejo divino tal como Pablo no había rehuido de anunciarlo públicamente y por las casas (He.20:27). En el Gospel Advocate de Agosto de 2009, David Tarbet, predicador de la congregación de White Rock en Dallas, afirma;
“La apostasía viene solo después de una larga ausencia de decidida predicación doctrinal sobre temas que la iglesia necesita escuchar. Cuando a los hermanos no se les recuerda la verdad, olvidan las razones para oponerse al error y pierden sus convicciones. Entonces los agentes del cambio pueden empezar los pasos que inevitablemente llevan a la adopción de los instrumentos de música, los roles de liderazgo de la mujer en el culto, la comunión ecuménica, y la membresía abierta . Han pasado años en muchas congregaciones desde que hubo fuerte enseñanza bíblica y predicación sobre esos temas. Seguramente los predicadores y ancianos serán responsables por lo que no se está enseñando y que debe ser enseñado”. ¿Estamos escuchando? Cualquier congregación que tenga una dieta constante de predicación no doctrinal se debilitará finalmente en cuanto a doctrina. Esto es precisamente lo que ha sucedido en muchos lugares en donde el instrumento está siendo introducido, las mujeres están asumiendo un rol público en la asamblea, y existe una actitud completamente denominacional hacia la iglesia. No es necesario predicar error y falsa doctrina para que estas condiciones se desarrollen. Solo es necesario tener predicación “blanda”, predicación que se ajuste a la iglesia emergente y a los modelos post-modernos, y predicación que no fortalece a los hermanos a “permanecer en la fe” (Hch. 14 :22). Cuando el 95 % de lo que es presentado en el púlpito pudiera ser predicado en la mayoría de las denominaciones de la ciudad, algo anda mal .