EL EVANGELISTA LOCAL
Las personas en general automáticamente asocian al evangelista local como el pastor de la iglesia. Al menos en Latinoamérica las denominaciones han tenido un impacto tremendo muy en particular el movimiento evangélico o mejor conocido como pentecostalísmo. Debido a este fuerte impacto las personas han sido saturadas con esta grasa de falsas doctrinas humanas que han enfermado los corazones de muchos. La figura del predicador local es de gran importancia en la congregación de la Iglesia del Señor. En el mensaje a las 7 Iglesias de Asia menor, cada vez que observamos la frase: “escribe al ángel en la iglesia de…” la palabra que se traduce ángel es la palabra griega anggelos y también puede significar mensajero. En este contexto es fácil de comprender que las instrucciones estaban siendo dadas a los predicadores locales de estas congregaciones para que pudieran exhortar a las respectivas congregaciones. Hay tres palabras interesantes para describir estos hermanos fieles: Euangelistes, Kerux, Kerusso. 1) Euangelistes: El que lleva buenas noticas, un evangelista. Se da este nombre en el Nuevo Testamento a aquellos anunciadores de la salvación por Cristo que no son apóstoles (Hechos 21:8; Ef.4:11; 2Tim. 4:5 ver Thayer.) 2) Kerux: Simplemente un anunciador, usado como predicador del evangelio (1Tim. 2:7 Ver W.E.Vine). 3) Kerusso: Ser un anunciador, proclamar como un anunciador, publicar, proclamar públicamente como en 2Tim.4:2 (ver Barcley). Algunos han argumentado sin ninguna base bíblica en lo absoluto que hay diferencia entre Evangelista, Ministro y Predicador y han querido hacer de la palabra Evangelista el hermano que tiene que ir de casa en casa tocando puertas y haciendo estudios, el ministro es más que todo para que nos represente afuera en el mundo y frente a otras congregaciones y por último el predicador es para que los domingos se ponga de píe y diserte sermones. Amigo mío esta idea es desecha por el mismo apóstol Pablo quién en 2Tim 4:1-7 utiliza los tres términos para referirse a la misma persona intercambiablemente. El trabajo del Evangelista puede ser muy bien identificado en 5 partes básicamente.
- EVANGELIZAR. La definición de las palabras explica el trabajo de ellos, traer buenas noticias a los perdidos. Que Predique la palabra al mundo. Aquello que es el primer marco identificable del buen predicador, ganar almas. Ningún evangelista completa su ministerio dedicándose solo al púlpito, el trabajo de ganar las almas es la tarea más grande que tiene en su lista pero también es la más satisfactoria.
- EDIFICAR LA IGLESIA: Es tarea del Ministro en conformidad con Efe 4:11. Cooperando con los ancianos y con los maestros de la Iglesia, para elevar el nivel de madurez espiritual de los miembros del cuerpo de Cristo. Para el predicador local es de suma importancia tomar el pulso a la congregación cada vez que va a predicar para lograr la efectividad deseada, requiere de mucho más conocimiento Bíblico que solo predicarle al perdido. Un buen ministro de Cristo deberá invertir horas de su valioso tiempo para estudiar (1Tim. 4:13). Hay hermanos que han alardeado de su habilidad de hacer un sermón en 1o 2 horas, esto más bien es un acto de vergüenza porque tal predicador no está dando la debida importancia a las escrituras a como debería. La Biblia no es como el periódico que solamente lo leí una vez y luego puedo decidir cual es mi interpretación de lectura. Para poder edificar a la Iglesia y que está pueda crecer, el evangelista debe tomar una actitud responsable para con el libro de la Vida (Ap.20:12) e invertir horas con el para que pueda predicar todo el consejo de Dios y edificar a la Iglesia con lo que necesitan oír y no tanto con lo que quieren escuchar.
- NOMBRAR A LOS ANCIANOS. Otra compleja tarea del evangelista Local. En Tito 1:5 Pablo encarga esta tarea a este joven evangelista. Algunos en la actualidad aceptan lo que el pasaje dice pero se oponen a que hoy un joven predicar esté a cargo de nombrar los ancianos de la Iglesia, esto simplemente es hipocresía y falta de honestidad con las escrituras. Por medio de la predicación, la enseñanza y la oración los evangelistas ayudan a los hombres a la madurez espiritual para servir como ancianos en la Iglesia. Esos hombres entonces son seleccionados por miembros que reconocen sus cualidades y son designados por el evangelista local por aprobación general. Por eso designar ancianos puede tomar muchos años.
- PREPARAR A OTROS PREDICADORES Y MAESTROS. Pablo encarga a esto otro predicador joven a enseñar también a otros (2Tim 2:2). Timoteo probablemente no contaba con todos los años de experiencia necesaria pero desde la niñez había sabido las sagradas escrituras. Una vez más vemos a un predicador calificado y competente aunque joven siendo encomendado por un apóstol de Jesucristo para una tarea tan singular como es la de preparar otros hombres fieles. Espero estimado lector que usted esté viendo la imagen tan clara como es, la edad no es un factor importante para Dios, pero el corazón y la disposición a servir si lo es. Siempre habrá empleo para un evangelista más. El preparar a otros y pasar todo el conocimiento bíblico y habilidades demuestra una actitud de humildad de quién así lo hace ¿Estamos realmente nosotros haciendo trabajo de evangelista?
- DEFENDER LA SANA DOCTRINA: Esta parte del trabajo quizás no sea las más fácil sino por el contrario la más difícil y muchas otras ocaciones la más amarga del ministerio, sin embargo muy a menudo la parte más necesaria. Solamente el estudio diligente y constante de la palabra de de Dios puede hacer al evangelista capaz de combatir al diablo junto a la astucia de los impostores astutos y delatar a los que violan el modelo de la sana doctrina (1Tim 1:3; Tito 1:10-13). Habrán muchos que se encerrarán en su propia interpretación de un pasaje y hablarán con mucho aplomo de su manera de creer pero… ¿Y los argumentos? están los pasajes que están usando adecuadamente en armonía con los contextos, con la lógica y con los demás pasajes de las escrituras? El predicador fiel del evangelio debe recordar siempre, siempre, siempre que no estamos aquí para convencer a la audiencia, estamos para presentar la palabra del Señor en toda su pureza, con todo su esplendor, con toda seguridad de lo que estamos enseñando y con toda fortaleza, es asunto de la audiencia si desea recibirla o si desea desecharla o contradecirla (Ver ejemplo en 1 Tes 2:13) . El buen evangelista de Cristo siempre defenderá la sana doctrina abiertamente por encima de los lazos de amistad, familiares o conyugales, defenderá la única doctrina verdadera por encima de cualquier hermano o hermana en la congregación, sea miembro, diácono, anciano o maestro, la doctrina de Cristo está muy por arriba de todos incluso por arriba del evangelista mismo. Lo único que nos va a llevar al cielo es guardar y cumplir su doctrina: “Yo soy el camino…nadie viene al Padre sino por mi” (Juan 14:6)
También vale la pena rescatar el hecho de que en el siglo primero las Iglesias del Señor sostenían a su predicador local económicamente. Podemos observar ambas cosas, tanto el principio de esta verdad como el mandamiento (Romanos 15:27; 1Co 9:1-14). En 1 Co 9 Pablo habla bastante claro del salario del predicador. Declara una analogía en el que los hombres comen de sus labores, y entonces él añade: “Si hemos sembrado semilla espiritual entre ustedes, ¿será mucho que cosechemos de ustedes lo material?”. Primero el apóstol estableció un principio, luego el lo aplicó al sustento del predicador al declarar que en efecto en los asuntos espirituales son mucho más importantes que los materiales y pasa a decir: “ así también el Señor ha ordenado que quienes predican el evangelio reciban del evangelio lo necesario para vivir” .V14. Algunos han pensado que es sabio que el predicador tenga su trabajo secular y que al mismo tiempo predique, pero es sabio ¿para quién?¿ para usted o para Dios? Ciertamente no para Dios 2Tim. 2:4 ninguno que milita se enreda en los negocios de este mundo. Pablo se vio obligado ha hacerlo en algunas ocaciones trabajo con sus manos, pero esto más bien es razón de vergüenza para las Iglesias, en las cuales trabajaba Pablo ya que en el inicio solo los Filipenses enviaban para su salario (Fip 4:15).
Los evangelistas son la sangre vital del la Iglesia. Tal vez lo son porque llevan el mensaje que salva a las almas necesitadas mientras que al mismo tiempo edifican a los santos para la madurez espiritual aún en contra de las constricciones del los hombres y del infierno mismo, son soldados que están en la linea del frente del batallón y no retroceden cuando el combate arrecia. Establecen las Iglesias y las mantienen, y se quedan cuando todos los demás salen, trabajan sin descanso para desarrollar Iglesias maduras y formar grupos de ancianos, su propia seguridad, intereses y pretensiones de esta vida están echadas en el fuego para que los demás puedan ser salvos en la venida de nuestro Señor Jesús. Una Iglesia sin un predicador local simplemente no puede funcionar eficientemente. Gracias sean dadas a Dios por haber incluido a tales hombres en su gobierno aquí en la tierra.