El DIOS QUE NO PUEDE SER TENTADO


El DIOS QUE NO PUEDE SER TENTADO

Ningún otro asunto es más delicado e importante que el carácter del Dios verdadero en la Biblia. Por esa razón considero que este tema no debe de ser manejado a la ligera o desestimado por asuntos de “terminología” a la primera oportunidad que tengamos. En este año cierta controversia ha surgido en torno al tópico, declaraciones incoherentes atentan a la santidad de Dios y por cinismo o sencillamente ignorancia recibe apoyo de unos cuantos que “pensando ser sabios se hicieron necios”. Quien escribe lo hace parado en la brecha de la convicción y no es para menos por las implicaciones contenidas detrás de este tema. La afirmación categórica que se hace es que Dios permitió que el diablo le tentara, allá en el libro de Job, cuando este pide a Job para zarandearlo. No solamente que el diablo tienta a Dios pidiéndole a Job y Dios se lo permite, sino que añadido a esta declaración se afirma que Jesús es Dios en la carne (Juan 1:14) y que el término “tentar” no debería de sorprendernos pues en Mateo 4 Jesús fue tentado pues era igual que nosotros al estar en la carne. Luego se trata de probar de que la palabra tentar es usada en el sentido de “poner a prueba” y que hay dos corrientes de ideas y esa es lo carnal y lo espiritual.

Jesus Tentado

El término “tentar” no debería de sorprendernos pues en Mateo 4 Jesús fue tentado pues era igual que nosotros al estar en la carne.

Permítame afirmar que aunque este artículo mantenga anónimo a los autores de esta controversia no es para nada la intención atacar a estas personas, sino única y sencillamente analizar y emitir una respuesta bíblica a la “fabula” que se ha construido y que está confundiendo a muchos. Considere conmigo las implicaciones y luego los huecos y falacias creadas entorno a una posición insostenible por la santa inspiración y que podría acarrear gravísimos problemas.

IMPLICACIONES

1.     Dios viola su propia naturaleza santa.  Si Dios le permite a satanás tentarle esta idea por si sola destruye la santidad de Dios. En Santiago 1:13 el texto dice que Dios “no puede ser tentado” esa es una regla de naturaleza. Es imposible hecho carne o en Espíritu Dios sencillamente no puede, ni siquiera mirar el pecado. El profeta Habacuc dice que Dios es muy limpio de ojos para ver el mal (Hab.1:13). Por lo tanto la naturaleza de Dios nunca cambia, no cambió estando en la carne y nunca cambiará.

2.     Lo hizo una ves lo sigue haciendo. Si satanás provocó y puso en tentación a Dios todo poderoso entonces ¿cúal es el limite? Si lo hizo una vez puede seguir haciéndolo pero no sabemos nada de eso ¿verdad? Es pura especulación al igual que afirmar que Dios le permitió a Satanás que lo tentara.

3.     Un chance para el diablo. Si Dios padre dejó que satanás le tentara entonces el diablo tiene mucha más oportunidad de la que habíamos pensado, y no solo oportunidad sino también superioridad, pues al dejarse tentar, Dios estaría sometiéndose a una “trampa” o “prueba” o “truco” el Dios de la Biblia que yo conozco Jamás se prestaría para un “jueguito” de ese tipo. Si él permitió que Job sufriera no fue para “tener un pulso” con satanás como lo afirman algunos, sino para moldear el carácter de Job aún más, y que tuviéramos a través de todas las generaciones en detalle un libro inspirado que nos explique a detalle la cuestión del sufrimiento del ser humano; como erróneamente los hombres observan el dolor mientras se hace palpable la forma tan distinta en la Dios ve el sufrimiento.

FALACIAS

A.   No reconocer distinciones.  Esta falacia sucede cuando al observar “x” y sus características similares a las de “y” se asume que son parecidos en todo. Note como se trae a colación que Jesús fue tentado y como Jesús es Dios en esencia, se sume que es igual al Padre en todo. Por lo tanto si Jesús fue tentado en la Carne en Mateo 4 también el Padre lo es, (o puede) en el relato de Job.  Esto es un movimiento astuto pero al final hueco. El Padre nunca ha sido tentado, mientras que el hijo estando en la carne si lo fue (Heb.4:15) pero sin pecado. Existe obviamente una enorme diferencia a la que no deberíamos de pisotear tan fácil.

B.    Paralelismomania verbal. Enumera paralelismos verbales como si esos fenómenos demostraran algún vinculo. Note con cuidado como se apela al significado del verbo “peraismos” y como este podría significar también “someter a prueba”.  Mientras que esto es verdadero en conexión a cada contexto en especifico, ¿Qué relación tiene esa explicación con el caso de Job? Con alevosía y ventaja se inserta en la mente del oyente que Dios no fue tentado en Job en el sentido de ser atraído al pecado sino que fue el sentido de ser puesto a prueba. Pero ¿en qué parte del libro de Job aparece la palabra “tentación”? Es claro que en ninguna parte más que en la mente llena de fabulas de algunas personas solamente. Pero en la explicación se estable un paralelismo verbal que sencillamente no existe.

C.   La falacia del hombre paja. Esta consiste en armar un argumento contrario débil para poder refutarlo mas fácilmente. Se ha dicho que Jesús fue humano y que un puñado de pasajes prueban lo real que fue su humanidad. A eso solo podemos responder amén y amén… jamás eso estaría en discusión por algún estudiante serio de la palabra porque la Biblia lo enseña. Note como un argumento débil es construido paralelamente, para distraer la mirada de la cuestión a tratar y así poder destruirlo más fácilmente dejando una impresión en el oyente de que realmente tal persona ha lidiado correctamente con la carga que tenía delante suyo.

La naturaleza de Dios impide que sea puesto en tentación. Aunque el texto en Hebreos 4 dice que Jesús fue tentado en toda la idea aquí es que hubo accesibilidad mientras él estuvo en la carne pero no que alguna de esas tentaciones llegase a él de la misma forma en la que nosotros somos atraídos. El hermano Wayne Jackson escribe “esto recuerda la declaración de Habacuc de que Jehová es de ojos más puros que para mirar el pecado (1:13). A diferencia de los dioses falsos del paganismo, Dios no se deja seducir por el mal. El Señor es perfectamente santo (Isaías 6: 3; Apocalipsis 4: 8)” (Christian Courier; God cannot be tempted).

Por su parte el hermano H. Leo Boles hace notar que en Mateo cuatro en la tentación de Jesús no es un evento que sucede espontáneamente sino que fue orquestado por el Padre cuando leemos que “el Espíritu le llevó al desierto”. El Padre seguía estando en control por lo que no, la tentación de Jesús no es igual a la nuestra. En el relato de Santiago la inspiración santa nos dice que somos atraídos a la tentación por nuestros propios deseos.

También el hermano Guy N. Woods hace una aportación magistral en su comentario a Santiago 1:13 cuando explica:

Dios está más allá de la esfera de la tentación.  El no puede ser tentado. La palabra aquí traducida no aparece en ninguna otra pare de las Escrituras, sino que es una compuesta de “a” (no) y perao, que podría significar “estar familiarizado con”, “tener experiencia en”.  Por tanto parecería que, cuando se afirma que Dios no puede ser tentado significa que no tiene experiencia en ninguna cosa mala y así sin base para la tentación. Uno que es totalmente removido del mal, jamás tendría el deseo de verlo o causar que aparezca en otros. Dios ni tienta ni es tentado.

Para concluir permítame afirmas que la naturaleza de Dios es total y absolutamente perfecta. Si Jesús estuvo sentado o caminando o corriendo en el desierto antes de la tentación es tema de discusión para aquellos que ignoran las escrituras pero aman alimentar “supuestos” para hacer parecer que la palabra de Dios es más interesante de lo que podemos llanamente leer. Roy C. Deaver dijo una vez que uno solo puede inferir aquello que se haya implicado. El Padre estuvo de acuerdo en que Jesús fuera tentado, el Espíritu también consintió y voluntariamente Jesús permitió al tentador acercarse, pues “es imposible que Dios”, (aún estando en la carne) sea atraído por el mal. Encarecidamente le exhorto amado lector a que pueda escuchar con claridad e inclusive leer con objetividad pero siempre procesar la información en el divino “filtro”. Atentar contra la naturaleza del creador es algo que no debe de ser tomado a la ligera por ninguno de nosotros. Dios nos ayude a poder manejar con precisión la palabra de verdad (2Tim.2:15)

Referencias.

Boles, Leo. (1999). Comentario del Nuevo Testamento. Nashville, TN: Gospel AdvocateCompany. Pág.77.

Jackson, Wayne.  Dios no puede ser tentado. Christian Courier.com.  Consultado el 6 de oct.de 2021.

Woods. N. Guy. (1963) Comentario del Nuevo Testamento Santiago. Nashville, TN: GospelAdvocate Company. Pág.31.

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