¡HAS BUENAS OBRAS Y SERAS SALVO!


¡HAS BUENAS OBRAS Y SERAS SALVO!

No es a decir verdad para mi un tema que me guste abordar, pero si uno muy necesario. La frase anterior es una de las que se escucha con frecuencia y sin lugar a dudas una de las que más refutamos con vehemencia los ministros del evangelio. Quizás en Latinoamérica sea mucho más fuerte esta corriente de pensamiento ya que existe más influencia del catolisismo Romano. La hueca, falsa y descabellada idea de que la salvación depende de las obras a realizar es muy muy popular aún dentro de la clase “alta y educada” pero ignorante de lo que enseñan las escrituras. ¡Has buenas obras y serás salvo! consiste en pensar que la tarea de todo hombre y mujer que desea agradar a Dios es hacer buenas obras a todas aquellas personas que están en necesidad, que estas personas ocupan de nuestra ayuda y así… entre más personas ayudemos y nos compadezcamos de ellos, más puntos sumamos a nuestra propia salvación, de ahí la profunda adoración a “la madre Tereza de Calcuta”. Utilizando la lógica esto cae en lo absurdo ya que si así es el caso, hay diferentes niveles de salvación y si yo hice buenas obras y alguien más logró hacer mejores obras que yo, significa esto que aquel va a ser salvo más que yo. ¡Absurdo!
La salvación no consiste en las obras que yo haga o no, sino más bien en si yo obedezco al evangelio de Cristo o no. Efesios 2:8 Pablo explica y derriba la argumentación de aquellos que piensan que por hacer buenas cosas voy a ser salvo y dice que la salvación no es por obras, para que nadie se gloríe. en explicación a este texto el hermano Willie Alvaenga comenta:
 Ahora Pablo nos vuelve a decir como dijo en el v. 5 cómo es que somos salvos, por medio de qué es que somos salvos… Los seres humanos son salvos por medio de la gracia que Dios extiende a todo mundo, y también somos salvos por medio de nuestra respuesta a esa gracia, la cual se llama “Fe”, nuestra obediencia a esa gracia por la cual somos salvos. Pablo enfatiza lo que en otros pasajes de la Biblia enseña… La salvación no es por obras, o méritos que el hombre pueda hacer para obtenerla. Muchos trataban de obtener la salvación, justificación por medio de las obras, pero Pablo dice esa no es la manera de hacerlo…  Hch. 15:1ss; Ga. 2:16; Hch. 13:39; Ga. 3:11 Por lo tanto, la salvación se extiende al hombre por medio de la gracia de Dios y por medio de la obediencia del hombre a los mandamientos de Dios.  Si la salvación se pudiera obtener por medio de méritos, entonces hubiera espacio para gloriarse. La salvación del hombre es un regalo que Dios ofrece al pecador “Pues es don de Dios” (Ro. 3:24; 6:23)
La otra corriente de pensamiento es que el bautismo NO nos salva porque, es una obra. El pasaje de Efesios aclara que no somos salvos por obras. Bueno es cierto la ultima frase, lo que no es verdad es el hecho de que el bautismo es una obra para heredar la salvación, sí así lo fuera Cristo no lo hubiera mandado como requisito para ser salvo (Marcos 16:16).  El hacer Buenas obras no salva a nadie aunque en el proceso de la salvación las buenas obras están incluidas. Es triste ponerlo de esta forma pero de acuerdo a lo que dijo Jesus, si la “madre Tereza” no se arrepintió y no fue sumergida en agua para el perdón de sus pecados, no podrá bajo ninguna instancia ser salva, así haya hecho miles de buenas obras. 
Cuando hablamos del asunto de la salvación debe de existir un respeto a la autoridad de Jesus ya que El clamo tener toda la autoridad en el cielo y en la tierra (Mateo 28:18-20). Cristo los arreglos para la salvación ya que es él mismo quien la da y por tanto el pone las condiciones, no usted, no yo ni mucho menos la Iglesia, Solamente debemos someternos a su voluntad y yo espero que lo estemos haciendo.
This entry was posted in Heiner Montealto and tagged , . Bookmark the permalink.

Comments are closed.